Para qué
Para qué entregar lo que somos a causas de las cuales finalmente no seremos partícipes?
Para qué dar nuestras vidas a tareas que aunque útiles jamás serán reconocidas o valoradas?
Para qué arriesgar nuestra honra y bienestar cuando estos riesgos no tienen más que una recompensa de papel que se va con el viento, con el tiempo y que no queda en la historia?
Las consecuencias anunciadas por los antiguos finalmente se dan, como oráculos que no son entendidos en su momento pero sí luego de haber sido consumadas.
Somos el resultado de nuestras propias acciones y en nosotros está el motivar a que las realidades se den de la forma en que las hemos planeado. El azar obra y en su caos propaga las necedades e ironías oscuras de la vida, que debemos aprender a enfrentar. "A montar se aprende montando" y a caer cayendo.
Para qué dar nuestras vidas a tareas que aunque útiles jamás serán reconocidas o valoradas?
Para qué arriesgar nuestra honra y bienestar cuando estos riesgos no tienen más que una recompensa de papel que se va con el viento, con el tiempo y que no queda en la historia?
Las consecuencias anunciadas por los antiguos finalmente se dan, como oráculos que no son entendidos en su momento pero sí luego de haber sido consumadas.
Somos el resultado de nuestras propias acciones y en nosotros está el motivar a que las realidades se den de la forma en que las hemos planeado. El azar obra y en su caos propaga las necedades e ironías oscuras de la vida, que debemos aprender a enfrentar. "A montar se aprende montando" y a caer cayendo.